Ernest y Celestine es una película de animación de 2012, de co-producción franco-belga basada en libros homónimos de la escritora belga Gabrielle Vincent. Conto con la dirección de Stéphane Aubier, Vincent Patar y Benjamin Renner. Condecorada en el Festival de Cannes de 2012 y nominada al Oscar por mejor película de animación en 2014.
Nos narra la historia de amistad entre dos personajes disparejos; Un oso algo gruñón llamado Ernest, y una ratoncita intrépida llamada Celestine. Ellos viven en un mundo donde sus especies se temen mutuamente, y la simple idea de un ratón y un oso trabando amistad es básicamente un delito a la moral y a la propia ley.
Ambos personajes terminan encontrándose por azares del destino y luchando por poder conservar su amistad. Realmente no quiero desarrollar demasiado la historia, pues creo que no hay mejor cosa que verla y descubrirla uno mismo, por lo que no diré mucho más sobre la misma.
Los personajes de la película son simples, pero muy entrañables, y gusta mucho ver cómo se va desarrollando la relación entre ellos de forma bastante natural. Las interacciones entre Ernest y Celestine hacen un gran trabajo siendo el hilo conductor de la historia.
La película tiene un mensaje básico, pero importante que nos habla de los negativos que son los prejuicios y la crueldad de la discriminación. No es ningún mensaje nuevo, pero si es bella la forma en que lo exponen. Además nunca está de más recordarlo.
Un punto fuerte de la película, es sin duda su apartado artístico. No estamos hablando de una súper producción que cuente con el presupuesto de Disney o de Dreamworks, o de grandes estudios japoneses, la animación en el apartado técnico no es de punta, pero el diseño de la misma es crucial, el estilo que pose la película, dibujada como si de acuarelas se tratase hace la visualización de la misma algo hermoso por sí solo. Logra que las carencias técnicas jueguen a favor del estilo visual. Si a esto lo acompañamos con la hermosa música con que cuenta, se obtiene una gran experiencia.
Estamos hablando de una película de animación que es prácticamente redonda, los más quisquillosos tal vez echaran en falta una historia más compleja o elaborada, sin embargo uno puede notar lo bello de su simpleza.
Sin duda una recomendación obligatoria para cualquier amante de la animación, o incluso para cualquiera que solo quiera pasar un buen rato, y ver una de las historias más tiernas jamás dibujada.
